Always, parte 8 ( Carla )

Una vez ya sentados en los sofás. Entró una joven mujer, que no tenía más de 30 años y con traje de sirvienta. Cuando ya estubo enfrente de nosotros, con una amable y bonita sonrisa nos pidió si queríamos algo de beber.
-Traenos Champán Marisa.
-Enseguida, señor.
-Bueno Mike, ¿ que puedo hacer por vosotros ?
-¿ Tenemos que ir tan rápido ? Disfrutemos un poco de la noche ¿ no ?
-Querido amigo, es tarde y mañana temprano tengo que acabar de cerrar unos cuantos tratos, así que si no te importa... decidme el motivo de esta agradable visita.
-Bueno vale, ¿ te acuerdas de que me debes un gran favor ?- En ese momento vino Marisa con un champán y cuatro vasos, los lleno y se marchó. En ese momento era todo silencio, pero encuanto se marchó Ron, retomo la conversación:
-Me acuerdo perfectamente, me salvaste la vida.
-Sí, bueno pues desde que te salvamos a mí y a mi hijo nos han estado persiguiendo esos tíos, por eso hace tanto tiempo que no sabes de nosotros. Esta noche mi hijo y esta joven habían salido y los han disparado. Como bien sabes, la gente no debe saber nada de este asunto, tú serías el primer perjudicado y no te haría ninguna gracia volver a estar metido en esto... Así que, hemos tenido que decirle a sus padres que ella ha fallecido. Por supuesto, tienen que identificar el cádaver y para ello necesitamos una de tus pastillas milagrosas.
-Entiendo... ¿ Para cuando las necesitas ?
- Para mañana mismo.
-Vale, mañana la tendrás. ¿ Algún favor más ?
-Bueno, viendo las horas que son nos preguntabamos si nos podríamos quedar a dormir hoy en tú casa.
-No hay problema, solo te pido una cosa.
-Claro, dime.
-Que despues de esto no volvais a mi casa hasta que todo el tema con los japo alla acabado.
-No te prometo nada, solo volveremos si es de extrema necesidad. ¿ te basta con esto ?
-Sí, si no queda más remedio. Llamaré a Marisa y que os lleve a cada uno a vuestras habitaciones. Buenas noches.- Se levantó y salió por el mismo lugar en el cual Marisa habia entrado y salido minutos antes.
Minutos después ya estabamos en otro pasillo acompañados de Marisa. Primero abrió una habitación que fue para Mike, luego la otra para Richard y por último, en frente de la habitación de Richard, la mía.
-Eres muy joven para estar metida con estos tipos.- Me dijo de repente Marisa. Parecía buena persona, no creía que hubiese ningún problema en hablar con ella.
-Esque sinceramente... no se donde estoy metida, además no me he metido yo, me han metido.
-Si quieres te puedo ayudar a huir, esto es peligroso, he escuchado que esta todo relacionado con el tema de los japos. Son de lo peor y si saben que estas con ellos no dudarán en hacerte daño.
-¿ Que es el tema de los japos ?
- Ya veo que estas aquí a ciegas. Los japos son una mafia que trafica con todo tipo de cosas: drogas, mujeres... Y si alguien se pone en su camino lo eliminan sin ningún problema y de la manera más cruel posible. Ron, es un extrafricante de drogas y un médico bastante famoso al que le quitaron todo cuando fue encarcelado. Gracias a Mike los japos no lo mataron. En cuanto los japos supieron que Mike era un espía decidieron olvidarse de Ron e ir a por él y su familia. Mataron primero a Lucía, la madre de Richard. Todo esto pasó en el extranjero. Hace ya unos años.
-¡¡Marisaaa!!
-Me he de ir, si piensas en huir de aquí solo me lo tienes que decir. Adiós.
Me dejó sola, en aquella enorme habitación. Ahora sola, podía observar la habitación con detenimiento, era más grande que mi salón. Fui mirando, todo el baño , los cajones, como si buscase algo, pero no sabía el que. La verdad esque Marisa me había asustado mucho y en lo único que podía pensar era en mi familia. En cuanto los echaba demenos y en cuanto debían estar sufriendo. En ese momento tocarón a mi puerta.
-Pase
- ¿ Estás bien Carla ?- Mi corazón empezó a latir más fuerte al escuchar la voz de Richard.
-Sí, tranquilo.- Pero era demasiado tarde, una lágrima cayó de mis ojos y se dio cuenta.
- Me acaba de llamar tú madre. Le he tenido que decir que estaba en Los Ángeles y no podía hablar en estos mometos. Carla, creo que es mejor que sepas en lo que te acabas de meter.
-¿ Me acabo de meter ? ¡ Si me habeis metido vosotros ! 
-La verdad esque algo de culpa sí que tengo... Sabía que no puedo tener una amistad porque enseguida los japos estarían detrás. Pero Carla, te quiero. Y no pude evitar acercarme a ti.- Al oir ese te quiero, me quedé asombrada, y por primera vez desde que nos habían disparado sentí un poco de felicidad.- Desde que te vi por los pasillos me fijé en ti y cuando me lanzé a hablar contigo en el parque supe que me estaba pasando, pero cuando estoy contigo me olvido de los japos y puedo, durante unos minutos o unas horas desconectar, ser feliz y amar.- Al ver que yo estaba sin palabras continuó- No tienes porque decirme nada, solo quería que supieses que te quiero como a nadie he querido y si te pasa algo.. yo.. no sabría que hacer.. supongo que lucharía y los mataría a todos y luego me suicidaría...- Ahora el que lloraba era él, tanto por la rabia como por el miedo, tenía miedo, lo pude ver en sus ojos y lo abrazé. Me acerque a su oido y le dije:
-Yo también te quiero.
Y abrazandome con más fuerza me dijo:
-Tengo miedo de perderte.

Always, parte 7 ( Carla )

- ¿ Que me tendreis que hacer un carnet falso o algo ? - Pregunté con un poco de curiosidad, ya que hacia tiempo que estabamos en el coche callados y quería saber cual sería el siguiente paso.
-No es mala idea... La tendremos en cuenta, pero por el momento tenemos que ir a un siteo para coger una pastillita nada barata para que usted se tome y parezca una muerta.- Ya estaba otra vez el padre de Richard dandome miedo... La verdad esque no lo soportaba.
- ¿ Muerta ? ¿ Para que ? ¿ No nos ibamos muy lejos ?
- Parece que no eres tan lista como pensaba... Aunque tampoco pensaba que lo fueses mucho- esas palabras vinieron junto a una carcajada que no me gustó nada pero por suerte Richard estaba a mi lado y como diciendo: estoy contigo me cogió la mano, fue inevitable que no me saliese una sonrisa- El caso esque como bien sabes, le han dicho a tus padres que has muerto pero, como es lógico tienen que ir a identificar tú cadaver y como no vamos a hacer una muñeca , te tomarás una pastillita muy rica que te dormirá pero para nosotros estarás muerta.
La verdad esque no me gustaba nada eso , pero había que hacerlo, no quedaba más remedio. Volvio a ver silencio en el coche, lo único que podía hacer para entretenerme era mirar por la ventana.
 Pasamos de ver millones de edificios a no ver ninguno. Todo era flores , campos, árboles... no había nada de actividad humana por allí. Al fin, después de varios minutos o alguna hora, vi una casa. Era grande, como las casas de campo americanas, la verdad esque era preciosa, estaba echa de madera y todo a su alrededor era perfecto.¿ Quien vivirá allí ? me preguntaba. Empezé a fantasear , imaginaba que de allí saldría un hombre y una mujer ya jubilados y felizmente enamorados o algun vendedor de coca... tantas cosas pasaron en mi cabeza que casi no me di cuenta de que nos dirigiamos hacia la casa.
- ¿ Quien eres ? - Sono una voz del telefonillo que habia en la berja. Era una voz ronca que daba miedo.
- Vamos Ron... ¿ No me conoces ?
- Debes identificarte, son las reglas.
-¿ Ron, desde cuando sigues tú las normas?
-Bien dicho amigo mio, ¿ Vienes solo ?
- Con Richard y una amiguita que nos ha dado problemas, pero a ti no te dará tranquilo.
-Vale, pasad.- Y en ese momento se abrió la enorme verja. Cuando estubo abierta del todo el padre de Richard arrancó y fue directo a una especie de parking que había justo en la puerta de entrada. Parecía conocerse el camino de memoria. Una vez bajados del coche salió un hombre de mediana edad, como el padre de Richard, pero Ron tenía un bigote que lo hacia un hombre interesante. Salió con un batín rojo y de bordes negros precioso, parecía que dinero no le faltaba. Nos hizo pasar hasta un gran comedor y una vez allí nos hizo sentar en unos sofas de piel marrón. Todo allí era elegantísimo. Ha pasado mucho tiempo pero a pesar de la mala memoria que tengo , esa casa nunca se me olvidará y menos lo que pasó en ella.

Always, parte 6 (clara)

Cuando vi el coche del Agente Pérez alejarse de mi casa, entre y me dirigí hacia el salón donde Tino estaba en su sillón fumando.
-No esta muerta.-Espere unos cortos segundos alguna respuesta, pero nunca se produjo, se quedo como si nada, sentado en su sillón de cuero marrón fumando una de sus pipas favoritas, así que, me adentre en la sala para poder verle la cara.- Tino, mirame, por favor. Se que nuestra hija no esta muerta.
-A las cinco he quedado con el Agente Pérez para verificar que es ella, vente si quieres y lo ves por ti misma. - Su voz estaba llena de dolor y preferí dejarlo a solas , sin decir palabra me fui hacia las habitaciones de arriba, supuse que me tocaba a mi darle la mala noticia a Emma. Para mi sorpresa Emma ya estaba levantada y por desgracia lo había escuchado todo.
-Yo tampoco creo que este muerta, mamá- Me dijo encuanto entré en la habitación. No pude contener mis lágrimas al ver a mi hija pequeña sentada en el borde izquierdo de su cama desecha. Me senté a su lado y comenzamos a hablar de lo maravillosa que era Carla y enseguida caí, Richard. Inmediatamente fui a la habitación de Carla a buscar su número. Marque y llamé.
-¿Diga?
-Hola , soy la madre de Carla , ¿ está Richard ?
-Sí , soy yo. Hola señora. ¿ Todo va bien ?
-Sinceramente, no. ¿ estuviste ayer con Carla ?
-Claro que sí , estuvimos en la fiesta y luego salimos a dar una vuelta. En un momento ella me dijo que se iba a casa y ahí nos despedimos. ¿ Porque lo pregunta ? ¿ Carla esta bien ?
-No, no lo está.
-Señora lo siento , me he de ir a Los Ángeles. Pero cualquier cosa me puede llamar. Siento no poder ser de más ayuda. Adiós. 
 

Un gran tesoro

Todo el mundo me repetía una y otra vez lo loca que estaba al comprar esa casa destrozada en la cual vivían millones de leyendas tenebrosas, que por supuesto se habían inventado los vecinos del lugar. Pero lo cierto esque no me sentía tan orgullosa de haberla comprado, arreglarla me costaría mil veces el valor de la casa y mucho trabajo. Pero  no me desanimé . Según los vecinos cuando caía la noche se veía un luz espectral en la que ahora sería mi habitación. Por pura curiosidad me quedé en la ahora fría casa a esperar ese ''espectro''. Me estaba quedando dormida cuando una luz cegadora me despertó. Al abrir los ojos, como pude, fuí hacia la luz. Me dirigí a la pared de enfrente donde vi una pequeña puertecita. La abrí con mucho cuidado, nerviosa de que me encontraría allí. Cuando la puerta estubo abierta y vi lo que contenía me quedé con la boca abierta, había oro, joyas, piedras preciosas... y una carta que decía: hasta las cosas más feas tienen un tesoro escondido.

Always, parte 5( Clara )

Al pegar Carla el portazo me derrumbé. mi hija se hacía mayor y no quería saber nada de mi. ¿ Que había echo yo mal ? Siempre he intentado estar ahí cuando me ha necesitado pero evidentemente, en algo había fallado.
Salí corriendo de casa y la vi subir en un Ford Fiesta negro. La había perdido definitivamente. Esperé junto a Tino su  llegada durante toda la noche hasta que sobre las seis de la mañana tocaron a la puerta.
-¿ Señor y señora Ruiz?
-Sí , pase. - dijo mi marido con tono serio. Yo no podía hablar y menos al ver a ese policía en la puerta de mi casa, ahora no me cabía duda , mi hija tenía problemas muy serios.
- Soy el agente Pérez, se me ha encargado cominicarles una muy mala noticia. Hemos encontrado a su hija, muerta por sobredosis.
Me esperaba cualquier cosa pero eso no. Vi como a Tino le salían las lágrimas y estalle, lloré y lloré. Tino cerró rápidamente la puerta del comedor para que nuestra hija pequeña Emma no escuchase nada. Una vez echo esto el policía continuo:
- La hemos encontrado tirada en el parque del mar. Hacía una hora que había fallecido, lo siento.- En ese momento levanté la vista del suelo y lo miré:
- Mi hija no está muerta
-Señora, lo siento , de verdad
-¡NO ESTÁ MUERTA! no puede ser.
-Clara, tranquilizate cariño. Siempre estará viva en nuestros corazones.
-¡Que no! ¡ Que está viva! ¡ Mi hija esta viva!- No podía aguantar más , yo sabia que Carla estaba viva y ellos me decían que no así que decidí irme a dar una vuelta y relajarme un  poco para luego ir a buscar a mi hija. Mientras me iba escuché que Tino le decía al agente Pérez:
- Perdone la, esto esdifícil para ambos.
Aluciné , yo estaba segura de que Carla estaba viva y yo la encontraría.  

El último te quiero

Su mirada, su sonrisa, su perfecta voz , todo él me llamaba a gritos, me pedía que lo ayudase
pero no podía, estaba atada de pies y manos, lo único que podía hacer es ver como la vida lo
abandonaba. Intenté desesperadamente reanimarlo , pero todos mis esfuerzos fueron en vano
. Lo último que me dijo fue : tequiero

Always, parte 4 ( Carla )

-¿ Podré ir a mi casa a recoger mis cosas? - Pregunté cuando el padre de Richard colgó el teléfono.
-Vale, ves a recoger tus cosas pero no les digas nada , hoy un policía irá a hacerles una pequeña visita.
- ¿ Porque ? ¿ Que le van a decir ? - ya estaba otra vez poniéndome muy nerviosa.
-Pues algo que va a pasar lo más seguro, que estas muerta.
-¡ No puede decirles eso a mis padres! ¿ Y si no muero ? ¡Además no se de que coño tengo que temer!
-Carla, piensa que si les dicen que estas viva y no puedes volver te buscarán y los matarán.
-Ves, mi hijo con lo tonto que es piensa más que tú. Ahora estás metida en algo muy gordo y debes temer de todo, de las paredes, de los árboles , de las piedras... porque por todo esta el peligro , no hay sitio en el que ellos no puedan dejar una bomba o puedan dispararnos...
-¿Ellos? ¿ Quienes son, decídmelo por favor ?
-Ellos son unos criminales, no debes saber ni  más ni menos.
-Me habéis metido en esto vosotros , creo que tengo derecho a saberlo.
-Papá, podemos confiar en ella. Yo lo hago...
-Tú, hijo mio , eres un sensiblón y ya te dije que en esta vida no puedes ser un sensible y menos tienes que enamorarte.
-Tú lo hiciste...
-Y mira como acabó, con la muerte de tú madre. Eso sabes que nunca me lo perdonaré ,pero no caeré en ese error dos veces. Tú la has metido porque te has encaprichado de ella.
Al fin llegamos al coche y nos dirigimos a mi casa, no podía creerme que fuese la última vez que los vería. El trayecto hacia mi casa era de un silencioso cortante. Cuando al fin llegamos bajé rápido y me dirigí hacia mi casa:
-Tienes cinco minutos.- Oí a lo lejos procedente de la voz del padre de Richard
-¡Carla! ¿ Donde estabas? Ya nos estábamos preocupando- Mi madre vino y me dio un gran abrazo, no pude contener mis lágrimas- ¿ Porque lloras ? ¿ Pasa algo ?
-No mamá, es simplemente que te quiero mucho.
-¿ Enserio no te pasa nada ? ¿ Porque has tardado tanto en venir del baile ? Nos dijeron que te vieron salir con tu amiguito... ¿ no te habrá echo nada que tú no quisieras . verdad?
-No mamá.. No te preocupes, enserio estoy bien. Tengo que coger unas cosas , me voy a casa de una amiga a dormir.- Y me fui rápidamente a mi habitación porque sino se lo hubiese contado todo a mi madre. No sabía a que me afrentaba pero les creía , sabía que ellos decían la verdad, estaba en juego las vidas de mucha gente, sobretodo la mía y la de mi familia. Además habían dicho que el padre de Richard era de la CÍA y eso significaba que me había metido en un buen berenjenal.
En cuanto recogí las cosas que sabía que necesitaría bajé a toda prisa pero mi madre me detuvo.
-¿ Que te crees que puedes venir e irte como quieras?¡ No has pasado la noche en casa y encima te vas! ¿ sabes como nos has tenido a tú padre y a mi ?- Mi madre hablaba con un hilillo en la voz que se notaba que estaba a punto de echarse a llorar
-Mamá lo siento he de irme- Segundos antes de cerrar la puerta, me giré y la vi llorando pero tube que cerrar, no podía ir y darle un abrazo y contarle todo lo que había pasado, decirle que lo hacía para salvarles la vida.
-Has tardado demasiado, estábamos apunto de irnos.
-Arranca y vámonos ya donde queráis que nos vayamos.